En Cataluña, hay platos que no solo se comen, se celebran. Los canelones de rustit son uno de ellos. Típicos del día de Sant Esteve (26 de diciembre), pero adorados todo el año, representan la esencia de la cocina de aprovechamiento, el arte de guisar con cariño y el sabor de la tradición familiar. En Can Bonet, los servimos como se ha hecho siempre: con tiempo, mimo y sin atajos.

¿Qué son los canelones de rustit?

Se trata de un plato de pasta rellena de carnes guisadas (normalmente pollo, ternera y cerdo), picadas y envueltas en láminas de pasta, cubiertas con bechamel suave y gratinadas al horno. El secreto está en el rustit, el guiso previo de las carnes con sofrito, vino y hierbas, que aporta profundidad y carácter al relleno.

Canelones de Can Bonet: fieles a la receta original

En nuestra cocina seguimos los pasos tradicionales:

  • Elaboramos el rustit con carnes seleccionadas y sofrito casero.
  • Picamos y mezclamos el relleno con pan mojado en leche y especias.
  • Enrollamos uno a uno los canelones en pasta cocida al punto.
  • Cubrimos con bechamel suave y una fina capa de queso.
  • Gratinamos al horno hasta lograr ese dorado irresistible.

El resultado: un plato meloso, cremoso, con sabores profundos y textura reconfortante. Ideal como principal o para compartir.

¿Por qué son tan especiales?

  • Son símbolo de fiesta y reunión familiar.
  • Representan la cocina de aprovechamiento bien hecha.
  • Combinan técnica, sabor y textura.
  • Tienen un sabor inconfundible que conecta con la memoria.

Conclusión

Los canelones de rustit son mucho más que pasta rellena: son historia viva de la gastronomía catalana. En Can Bonet, los servimos como merecen: con respeto, tiempo y sabor. Ven a probarlos y descubre por qué este plato es uno de los más queridos de nuestra carta.

Consulta nuestra carta completa o reserva tu mesa. Si quieres conocer más sobre la técnica que los hace únicos, te recomendamos el artículo “¿Qué es un rustit? Técnica y sabor en la cocina catalana”.